4º Congreso de la Red Europea «Vivre la Ville !» en Bruselas

Del 23 al 25 de marzo se celebra una nueva edición del congreso de la red europea «Vivre la Ville !» (¡Vivir la ciudad!) en Bruselas.

La contaminación acústica es uno de los principales inconvenientes para la calidad de vida y la salud de los habitantes de las ciudades. Las políticas públicas relacionadas con la lucha contra el tráfico rodado lo tienen en cuenta. Sin embargo, una creciente fuente de molestias queda completamente marginada por los programas políticos: la contaminación acústica nocturna que afecta a los habitantes de los distritos turísticos y «festivos».

Demasiados funcionarios electos y administraciones no toman en serio el hecho de que las condiciones de descanso de los ciudadanos se vean afectadas y su salud se vea seriamente debilitada debido a la alta densidad de bares en su vecindario o debido a actividades o eventos turísticos.

Si el consumo nocivo de alcohol sí se pretende abordar de alguna manera, el alboroto y el acaparamiento privado del espacio público para beber, defecar o degradar el entorno se consideran triviales. Su impacto presupuestario en las finanzas públicas se está deslizando bajo la alfombra.

Peor aún y más preocupante, diferentes ciudades en Europa se están estructurando para promover un nuevo dogma: el de una ciudad en acción 24/7, basada en una supuesta equivalencia de día y de noche, obviamente contradicha por todos los datos médicos. Aunque se trata de un problema muy serio, está fuertemente respaldado por el poderoso lobby de la industria nocturna.

La ceguera de las políticas públicas, tanto en Bélgica como en la mayoría de los Estados europeos, preocupa a un número creciente de ciudadanos, representados por asociaciones cada vez mejor coordinadas entre sí. En este contexto nace la Red Europea «¡Vive la ciudad!».

La ciudad debe ser animada, pero debe permanecer habitable.

Más información sobre el 4º Congreso «Vivre la Ville !» en este enlace.

Nuestra postura ante el debate sobre las terrazas

El Ayuntamiento de Madrid lanzó a través de su web DECIDE una especie de cuestionario (a lo que ellos llaman «Debate») sobre el tema de las terrazas:

En teoría, la razón para proponer este cuestionario es recabar respuestas de los ciudadanos en base a las cuales ver si es o no conveniente modificar la actual Ordenanza de Terrazas.

Las asociaciones de vecinos de centro reunidas en la Coordinadora Vecinal Madrid Centro le pedimos al actual gobierno, hace casi 3 años, a las pocas semanas de llegar al poder, una moratoria y una urgente modificación de la actual ordenanza… con resultado de MENOS QUE CERO.

El Debate planteado en el portal DECIDE, para el periodo 8 de feb al 9 de marzo está teniendo una ridícula repercusión y participación. La pregunta más respondida apenas tiene 100 respuestas y la menos no llega a 50. Lo que evidencia el absoluto fracaso, primero de la política de participación del Ayuntamiento y segundo de la idea de proponer debates técnicos a la ciudadanía en base a los cuales legislar… Más que participación, el Ayuntamiento ha montado un sistema para tratar de justificar su inacción y su falta de capacidad técnica y de valentía política.

Ante esta situación, proponemos las siguientes respuestas a las preguntas planteadas por el Ayuntamiento, que queremos compartir con nuestros vecinos.

 

¿Qué opinión tiene sobre si el número de terrazas existentes en la actualidad es adecuado o no para una ciudad como Madrid?

Una pregunta así dirigida a la ciudadanía en general no tiene mucho sentido. El ciudadano de a pie no conoce el número de terrazas existentes en la ciudad, ni tiene elementos de comparación ni criterios técnicos para saber si es adecuado o no. Por lo tanto deberían re-formular la pregunta.

Obviamente, la percepción sobre este punto siempre será subjetiva, y tendrá mucho que ver con el impacto que estos elementos tienen a título personal con cada ciudadano. No se entiende que esta percepción subjetiva sea útil para el tratamiento técnico-jurídico de la cuestión que el Ayuntamiento debería hacer.

 

¿Qué piensa sobre si la configuración y/o ubicación actual de las terrazas en los espacios públicos pueden constituir o no una distorsión para la utilización y disfrute normal del medio urbano?
En una gran parte de los espacios públicos, especialmente en distritos donde el número de terrazas es elevado y/o donde están encajadas en una trama urbana no adecuada para las terrazas, como calles y aceras estrechas, saturación de locales de hostelería etc… CONSTITUYEN UN ELEMENTO DE DISTORSIÓN.

En espacios públicos amplios y abiertos, como por ejemplo en parques y jardines, bulevares y espacios donde no se interfiere con otras actividades fundamentales y prioritarias para el interés general, como es la movilidad peatonal o el derecho al descanso, puede que no sean elementos de distorsión.

 

¿Qué opinión le merece la necesidad de modificar la actual Ordenanza de Terrazas y Quioscos de Hostelería y Restauración?

Es absolutamente urgente para recuperar el uso normal y civilizado del medio urbano, alterado gravemente por la Ordenanza vigente, cuyo resultado real para el interés general de la ciudad y para la mayoría de los ciudadanos se ha traducido en DESTRUCCIÓN DE CIUDAD Y DE LA CONVIVENCIA ENTRE LA VIDA Y EL OCIO.

 

¿Qué aspectos mejoraría en la regulación actual de las terrazas y quioscos?

TODOS, EMPEZANDO POR:

REDUCIR número de terrazas, ubicaciones de las terrazas, número de elementos por terraza, horarios de las terrazas.

AMPLIAR distancias entre terrazas y con respecto a fachadas y demás elementos de la trama urbana, tasas que se cobran por la explotación económica del espacio público.

REGULAR Y MULTAR si no se respeta la tipología de los elementos en las terrazas, disposición de las terrazas, competencia desleal con otras actividades.

 

¿Considera que la mayoría de las instalaciones permanentes que tienen en la calle algunos establecimientos son excesivas, adecuadas o insuficientes?

SON UN DELITO URBANÍSTICO. Son de facto elementos que consumen Edificabilidad Urbanística Lucrativa sin cumplir la Ley del Suelo.